«Siento la mayor felicidad que jamás he sentido»

Javier Seoane, gallego afincado en Elche, tras un viaje de voluntariado a India, decidió solidarizarse con Semilla para el Cambio. Para ello, el pasado septiembre corrió 260 kms del Camino de Santiago, desde Astorga a Compostela, en cinco días, con el fin de recaudar fondos para la ONG. Un reto solidario con el que ha conseguido financiar un almuerzo diario para 40 niños durante un año y las revisiones odontológicas y oftalmológicas que Semilla para el Cambio desarrollará en 2011-12 para los niños de los slums de Sigra.

A pesar de los entrenamientos y de los duros 5 días de carrera (con una fuerte tendinitis), se ha sentido arropado en todo momento: apoyado por Semilla para el Cambio y Deportistas Solidarios, acompañado por su amigo Pedro, con el que creó la plataforma Solidaridad como Meta, y respaldado económico por más de 90 personas que han secundado la causa. Así nos lo cuenta:

Colaboraste como voluntario en la Fundación Vicente Ferrer durante 5 meses. ¿Cómo fue la experiencia?

“La experiencia en la Fundación Vicente Ferrer fue muy buena, llena de alegrías y tristezas, pues al haber trabajado en urgencias, me encontré con todo tipo de casos”.

¿Ha habido un antes y un después de tu viaje a India? ¿Ves las cosas diferentes en tu vida ahora?

“La verdad es que sí que ha habido un cambio en mi vida después de haber visitado la India. El haber conocido la cultura india tan de cerca, tanto lo bueno como lo malo, el haberme sentido uno más, ha hecho que me volviera todavía más solidario. Además me sirvió para valorar lo que tengo, pues como en la vida, sólo te das cuenta, cuando dejas de tenerlo”.

¿Por qué India?

“La India se convirtió en el destino, porque había algo que me atraía, que me decía que tenía que visitarla y colaborar”.

¿Por qué elegiste Semilla para realizar el reto solidario?

“Estuve visitando la ONG cuando estuve 10 días en Varanasi. Pude ver la alegría descrita en los ojos de los niñ@s, observé el esfuerzo que María hacía y cómo se desvivía tanto por lo niñ@s como por la gente que visitaba la ONG.

Me gustó mucho la transparencia con la que trabajaba, con todo muy claro para que no surgiera ningún tipo de duda”.

¿Cómo surge la idea del reto?

“La idea surgió cuando regresé de India, y me dí cuenta que tenía un compromiso con ese hermoso país. Así que junté las dos cosas que más me gustan, deporte y ayudar, y surgió el reto”.

¿Crees que el deporte es una buena vía para la integración?

“A través del deporte se establecen unos lazos muy fuertes. Creo que es una buena vía ya que se basa en unos valores sólidos”.

Durante el reto, ¿te ha parecido que la gente está predispuesta a colaborar en cooperación?

“La verdad es que me he dado cuenta que muchísima gente está dispuesta a colaborar, siempre que les garanticemos que lo que hagan o lo que aportan llega a su destino”.

¿Qué ha supuesto para ti realizar este reto?

“Ha sido una experiencia maravillosa, la cual me ha llenado el corazón de alegría, no por el reto en sí, sino por el objetivo”.

¿Cuál ha sido la relación con Semilla durante tu colaboración?

“He tenido un relación muy buena, y sigo teniéndola”.

¿Habías hecho alguna cosa similar anteriormente?

“No. Había participado en alguna carrera solidaria, pero nunca había realizado un reto así”.

¿Te planteas hacer otros retos similares? ¿Por qué creaste la plataforma Solidaridad como Meta?

“La motivación principal que tuvimos tanto Pedro como yo, para crear Solidaridad como Meta es el poder ayudar a la gente que tiene mayor necesidad y a las ONGs, de una manera diferente. Y al mismo tiempo poder sensibilizar a las personas que nos rodean y también a aquellas que no nos conocen”.

¿Qué opinas de la Plataforma Deportistas Solidarios?

“Deportistas Solidarios es una buena plataforma para que la gente siga haciendo deportes con causa. Están haciendo una labor muy buena y un trabajo muy duro”.

¿Cuáles son tus planes a corto – medio plazo?

“Ahora mismo nos encontramos ideando un nuevo reto, y por tanto toca trabajar mucho”.

¿Qué se siente cuando sabes que gracias a ti más de 40 niños comerán durante un año y otros 70 recibirán apoyo dental y oftalmológico?

“Siento la mayor felicidad que jamás he sentido. Pero debo decir que esto no ha sido sólo gracias a mi, sino a todas las personas que me han apoyado y que han creído en mi y en Pedro”.

En retrospectiva, ¿qué recomendaciones harías a otras personas que quisiese llevar a cabo un reto similar?

“Les diría que adelante. Pero que lo hagan con cabeza, que no dejen ningún cabo suelto, lo tengan todo bien especificado y todo bien mirado. Poco a poco va saliendo. Lo más duro no es correr, pues para eso te entrenas, lo más duro es que todo se cumpla, pero a la vez es muy gratificante”.