El equipo docente de Semilla para el Cambio en Varanasi asistió la semana pasada a una formación sobre nuevas metodologías de lecto-escritura, enmarcada dentro del Programa de Educación Integral de la ONG.
El objetivo de esta reunión era dotar a los profesores y profesoras de nuevas herramientas que ayuden a potenciar las habilidades de los estudiantes, para que adquieran fluidez a la hora de leer y mejoren la ortografía, la expresión y la comprensión. La formación se centró, sobre todo, en la conciencia fonológica de las palabras, una habilidad que permite a los niños/as reconocer y usar los sonidos del lenguaje hablado y que es fundamental para aprender a leer.
“Para aprender a leer, los estudiantes deletrean las palabras y las memorizan. Esto les limita mucho la hora de descubrir nuevas palabras, porque no saben identificar los sonidos”, dice Rumpa Paul, coordinadora del equipo docente de Semilla.
Hasta ahora los docentes enseñaban a leer a través de la memorización de palabras y letras, en los niveles más bajos, y limitaban los ejemplos de los sonidos a uno o dos, por ejemplo: “A for apple”, “B for ball”; “cat”, “rat”, etc. Esto conlleva, a la larga, a una falta de relación de sonidos entre palabras y afecta a la comprensión de textos más complejos.
La nueva metodología de trabajo -aprender a leer a través de los sonidos-, se aplicará a partir de ahora tanto en los talleres de lecto-escritura, que la ONG tiene en marcha desde hace varios años, como dentro de las aulas.
En la formación, también se dieron algunas pautas para hacer un seguimiento de la evolución de los alumnos, así como para ser capaces de diagnosticar posibles dificultades como la dislexia o la falta de concentración. Por ejemplo, un caso de dislexia en el estudiante vendría dado por una continua confusión entre sílabas, mezclas de mayúsculas y minúsculas, una lectura monótona, lenta y sin comprensión, la sustitución de unas palabras por otras, entre otros muchos síntomas.
A finales de esta semana, se hará una segunda formación, en este caso de manera práctica, a las profesoras del taller de lecto-escritura de los centros de Sigra y Dashashwamedh para asegurar la consolidación de los contenidos adquiridos y ponerlos en práctica.