Una comida para unir al equipo

Una comida para unir al equipo

El pasado fin de semana, Semilla para el Cambio celebró la comida anual que organiza en India para reunir a todo su equipo sobre el terreno. Unas 35 personas, entre coordinadores, profesorado, staff, promotoras y voluntarios, de los centros de Sigra y Dashashwamedh, acudieron a esta esperada cita.

Eran las dos de la tarde y los y las comensales se colocaban en sus sitios para dar comienzo al evento. Antes de empezar, María Bodelón, directora y fundadora de Semilla, dio un breve discurso introductorio en el que resumió los avances del último año y agradeció la gran labor que día tras día lleva a cabo toda la plantilla de trabajadores/as. “Este año hemos hecho grandes avances, sobre todo en Promoción de Salud. Ratika y el equipo de promotoras han trabajado mucho y eso se ha visto reflejado en los buenos resultados obtenidos, sobre todo, en el área de vacunación y seguimiento del embarazo”.

María Bodelón agradece el buen trabajo realizado durante el año a todo el equipo de Semilla para el Cambio.

Durante la comida, que transcurrió de forma alegre y distendida, todos los miembros del equipo pudieron compartir anécdotas y ponerse al día sobre los cambios en sus respectivas áreas de trabajo. Igualmente, fue una ocasión para que los equipos de Sigra y Dashashwamedh pudieran reunirse.

En la comida estaban también las mujeres de los slums que trabajan como promotoras de salud, así como las cocineras de los comedores escolares, ya que todas ellas forman parte del staff de Semilla en India.

La comida transcurrió de forma alegre y distendida.

Muy pocas veces coincidimos con nuestras compañeras del otro centro. El sábado fue una oportunidad de estar todas juntas y conocernos mejor”, dice Sumitra Devi, cocinera en el centro de Semilla en Dashashwamedh.

Tras el postre y una sesión fotográfica que duró largos minutos (¡todos querían hacerse fotos con todos!), los invitados se dirigieron a Assi Ghat, donde disfrutaron de una agradable tarde mientras tomaban un rico chay (te) de limón a orillas del río Ganges.

Nos lo pasamos muy bien y nos divertimos mucho. Cuando propusieron ir a ver el río después de comer, no dudamos en unirnos al grupo. ¡Algunas de las mujeres no lo habíamos visto nunca! Fue un bonito día”, dice Hasina Bibi, promotora de salud y artesana de Semilla.

El día culminó con un chay a orillas del río Ganges.

“Hacía tiempo que esperábamos este día. Es importante que, de vez en cuando, los trabajadores de ambos centros nos reunamos fuera del ámbito laboral y compartamos ratos juntos, porque estos encuentros informales nos unen como equipo”, cuenta Hemant Singh, coordinador de proyectos de Empoderamiento de la Mujer.

La comida anual es muy especial para Semilla para el Cambio. Es el día del año en que todo el personal de la ONG se reúne en un ambiente informal y en el que se dejan a un lado los ordenadores, los libros, las cocinas y las máquinas de coser para compartir un rato de diversión, amistad y compañerismo entre todos y todas.